DESCUBRE CUÁL ES TU CAMINO
¿Te gustaría salvar el mundo sacrificándote en el altar de las necesidades de los demás? ¿O anhelas arrojarte a los brazos de eros para encontrar la plenitud? ¿O eres una luchadora nata y el miedo es una palabra sin sentido para ti? Tal vez hayas hecho de tu vida un santuario para Dios.
Son tendencias esenciales y cada una de ellas pertenece a un arquetipo del alma femenina. ¿Cuál te representa mejor? Vale la pena averiguarlo. Así te conocerás de verdad y sabrás cuál es el camino más fácil y seguro que te ayuda a cumplir tu leyenda personal.
Todas las facetas de la Gran Diosa están en ti
Cada mujer es una encarnación del Eterno Femenino y es potencialmente perfecta. En ella se esconden todos los aspectos, todas las tendencias sublimes, todas las facetas de la feminidad pura e ideal. Todos los arquetipos.
Cuando pensamos en los miles de millones de mujeres que hay en el mundo, cada una con su belleza única e irrepetible, parece difícil encajarlas a todas en unas pocas categorías arquetípicas. Y sin embargo así es.. Cada mujer contiene estos arquetipos en su alma y los encarna a su manera.
Los arquetipos femeninos son patrones universales de energía que se encuentran en el inconsciente colectivo. Son rasgos comunes que manifestamos.
Cada uno de nosotros expresa naturalmente un arquetipo dominante, que nos aporta dones, pero también tiene un lado de sombra. ¿Por qué es útil explorar estas categorías esenciales? Descubrir cuál de ellos es predominantemente específico para nosotros y en qué medida lo expresamos en nuestra vida actual.
Y a partir de ahí saber dónde encontramos nuestra verdadera fuerza para nuestro viaje interior.
Cuando exploras tu arquetipo dominante los conquistas a todos
Madre, fascinadora, heroína inspiradora e iniciadora.
En el alma de cada mujer, estos cuatro arquetipos reflejan aspectos esenciales del misterioso Eterno Femenino. Hoy en día, la mayoría de las mujeres las experimentan a través del filtro del ego, de una personalidad limitada y forzada, por lo que muchas se sienten insatisfechas, no cumplidas.
Si pudieran descubrir la energía de estos focos universales en su universo interior, se sumergirían felizmente en su propia forma de ser. Sin querer aparentar nada más de lo que son, sin expectativas ilusorias de los demás, sin arrepentimientos.
Cada mujer encarna predominantemente uno de estos arquetipos. Si consigue entenderlo y vivirlo de forma plena y consciente, todos los demás se activarán al instante.
Es como elegir una ruta hacia la cima de una montaña, y una vez que llegas allí descubres que puedes disfrutar de la magnífica vista en todas las direcciones. El camino no siempre es fácil, pero como está hecho para ti, te llevará con seguridad hasta el final.
¿Cómo identificas tu arquetipo?
La forma más fácil y eficaz es observar y decodificar tus reacciones frente a situaciones críticas. Las mujeres del arquetipo de la Madre encuentran consuelo en la ayuda desinteresada a los demás. Las fascinadoras harán que todo sea lo más agradable posible y estarán muy contentas si cuentan con el apoyo de una pareja.
Las heroínas no conciben la idea de crisis y siempre encuentran soluciones para resolver sus problemas de forma eficaz. En cuanto a las Iniciadoras, en los momentos difíciles de la vida se dirigirán a Dios en busca de ayuda.
Por otro lado, el estudio de los aspectos de sombra de los arquetipos nos da claves importantes para descubrir dónde tenemos todavía trabajo por hacer, según la categoría en la que nos encontremos. En general, cuando el arquetipo se expresa de forma armoniosa, no hay dudas.
Otra forma de identificar nuestro arquetipo es preguntar a nuestros amigos, después de haberlos fundamentado en esta información. Descubrir el propio arquetipo es una puerta secreta que abre el camino al alma.
Si intentamos recorrer el camino de otro arquetipo, todo se vuelve mucho más difícil. Pero cuando seguimos lo que nos caracteriza, la comunicación con el universo es mágica. Las innumerables sincronicidades hacen que el diálogo sea vivo y delicioso. Y descubrir el Ser es la mayor recompensa que podemos esperar.
Estate atenta, pronto podrás leer un artículo para cada uno de los cuatro arquetipos: Madre, Fascinadora, Heroína, Iniciadora.